Las transformaciones digitales en la banca no son nada nuevo y, como sucedió con tantas empresas durante la pandemia de COVID-19, las migraciones a la nube y la adopción de software como servicio (SaaS) continuaron progresando y, en algunos casos, incluso se aceleraron. Sin embargo, los bancos no han abandonado los centros de datos privados; de hecho, los centros de datos privados siguen siendo una pieza esencial de su estrategia de centro de datos de TI. Hasta el 57 % de los que respondieron a una encuesta de IDC de 2020 indicaron que su banco ya estaba respaldando un entorno de centro de datos híbrido. Además, el 40 % reveló que implementaría la nube híbrida en los próximos 12 a 24 meses.
Las regulaciones, el gobierno de datos, el control de la seguridad y las demandas de rendimiento se mencionaron como justificación para mantener la parte del centro de datos privado de sus entornos de nube híbrida. Los centros de datos en las instalaciones, la ubicación conjunta y la nube privada de terceros son todas opciones a medida que las empresas modernizan sus centros de datos de tecnología heredada. Lo que se hace evidente rápidamente es la brecha en la visibilidad para asegurar la operación exitosa de esas transformaciones.
El monitoreo de paquetes de datos en centros de datos privados se convirtió en el estándar de oro para garantizar el rendimiento de la red y las aplicaciones en esas infraestructuras. Se descubrió que las transformaciones digitales con redes definidas por software, virtualizaciones, adopción de aplicaciones basadas en web, SaaS/comunicaciones unificadas como servicio (UCaaS) y tecnologías de nube privada de terceros eran puntos ciegos para muchas organizaciones de TI que anteriormente dependían de visibilidad del flujo de paquetes.
Las transformaciones digitales tienen la atención del liderazgo ejecutivo y de TI senior en cualquier empresa, y más aún en entornos bancarios, ya que la red se ha convertido en la autopista financiera. Validar que el nuevo entorno está operando a los niveles esperados y requeridos es una parte esencial de cada plan de transformación y requiere una forma de medir esa operación. Además, ha habido innumerables ejemplos del valor de usar métricas de rendimiento y uso del entorno existente para ayudar a tomar decisiones inteligentes durante las fases de planificación y migración de estos proyectos. Sin duda, el monitoreo y análisis antes, durante y después para asegurar el rendimiento de la red y las aplicaciones a lo largo de todas las fases de las transformaciones digitales ayuda a aumentar su éxito general.
Hay varias formas en que los equipos de TI están recuperando la visibilidad y el control de sus centros de datos privados y entornos de nube híbrida para garantizar el éxito de sus aplicaciones y servicios financieros.
Explore el enfoque de un banco para recuperar la visibilidad y el control al implementar un centro de datos de nube privada de terceros.
Fuente: https://bit.ly/3pmYB8Y